viernes, 23 de abril de 2021

DE TANARRIO A MOGROVEJO POR LA RUTA DE LOS VALIENTES

 


DE TANARRIO A MOGROVEJO POR LA RUTA DE LOS VALIENTES.


Sábado 10 abril de 2.021


Sabido es que a Liébana de sobrarle algo, lo que le sobran son posibilidades. Son muchos los atractivos de esta región, el espacio del parque nacional de los Picos se Europa no solo alberga majestuosas montañas  surgidas del fondo marino y talladas por milenios de evolución geológica, a ese caos mineral se une una exuberante vegetación y  una fauna singular, son muchos los ríos y arroyos que acuden al padre Deva  dibujando un escenario rico y espectacular nos proponemos recorrer.

Nuestro recorrido comienza en la aldea de Tanarrio, en las llamadas " tercias " del valle Camaleño, situada a 640 metros es un enclave singular que muestra la magnifica silueta del macizo oriental. Sus laderas durante el presente invierno y primavera se han visto cubiertas de nieve en repetidas ocasiones.



 La semana traía augurios de lluvia  el día señalado para la ruta, el pronostico asustaba un poco, pero no tanto como para que estos 10 montañeros 10, se quedasen en la cama y animosos y Valientes acudiesen a su cita con las montañas desde Reinosa , Torrelavega , Santander y Liébana.


Nuestra compañera Sonia del Rio grabó los datos de la ruta en la aplicación wikiloc, por si alguien de los que no pudieron asistir se anima a repetir este bello recorrido. En la foto ya se intuye la masa forestal que atravesamos.


El recorrido que realizamos sigue el trazado que desde hace cientos de años siguieron pastores y vaqueros en el trasiego de animales desde el valle a los pastos de altura en los puertos de Áliva, caminos viejos y ahora poco recorridos por una ganadería en retroceso. En la foto tras las vacas de Ramón González en la aldea de Tanarrio.


Atravesando las calles del barrio de arriba de Tanarrio, el día nos ofrecía unos esperanzadores claros en el cielo, nos encaminamos hacia el formidable barrera de los picos, una primavera en esplendor nos jalona el camino.


Una buena parte de nuestro recorrido se puede ver esta foto, como se puede apreciar estamos ante una de las mayores reservas forestales del noroeste español, protegida con la calificación de Parque Nacional. Son muchas las especies forestales que alberga y algunas de la 1600 flores y plantas que en Liébana viven.

El grupo dominante de cumbres de este sector del macizo oriental o de Ándara es el correspondiente a los picos de Cámara (2.194 ) , el pico Pozan ( Jisu 2.178) , Prao Cortés (2.288)  y pico Cortés (2.373)  cubierto por las nubes .


El grupo se adentra en el macizo, un buen y único camino nos conduce remontando la trayectoria del río Belondio, nos acompañan desnudos robles  a ambas márgenes, el día estaba inquieto en lo atmosférico, pero aguanta y nos permite avanzar con una agradable temperatura. 


Una parte del trazado, una cuarta parte aproximadamente, coincide con la conocida y popular ruta " Bajo Picos " en la foto estamos en la parte más alta de ese trazado que nosotros íbamos a rebasar ampliamente. Los avellanos son ahora la especie vegetal dominante. 


Paco y Alfonso fueron en este caso los guías del trazado. El viejo maestro de viejos caminos, a la cabeza, contempla la entrada del hayedo que se levanta ante nosotros y cuya entrada es preciso conocer. Nubes grises seguían colgadas sin derramar gota, era la suerte de los valientes , quien allí estuvo...lo sabe.

Caminamos hacia la cabecera del río Belondio, en este punto vienen a confluir los diferentes arroyos provenientes de las profundas canales que vierten las aguas que acabaran en el Deva . En la foto la canal del pico Cortés. 


El desafiante pico Pozan conocido como Pico Jisu se recorta con su impresionante arista, una de las escaladas más bellas de los Picos. Nacen aqui las heladas y transparentes aguas que forman el eje de nuestro recorrido, en sus riberas crecen gran parte de los árboles autóctonos del parque Nacional.



Dos instantes del paso del río por su parte más estrecha y accesible, es este punto el utilizado por el ganado antes de internarse en el hayedo.  Un paso sin dificultad y lleno de belleza. la mañana avanzaba y algunos participantes en camiseta dan fe de que la temperatura iba subiendo.


El invierno se resiste en dar paso a la primavera, nieves tardías han cubierto el bosque alto una y otra vez en el tránsito de las estaciones, la desnudez de los arboles así lo atestigua, un manto de hojas de las hayas alfombró una parte de recorrido. Concentración en los caminantes, rumor de crujientes hojas en las botas.


 Lodi y Pilar posan junto a un magnifico haya, sus siluetas nos dan una idea del porte que estos árboles alcanzan, es su reino, aqui son los señores que milenios atrás desplazaron a los robles en la conquista de las laderas más favorables, la frondosidad de sus ramas no deja espacio para otras especies.




Cuatro bellos ejemplos de la flora del hayedo, Liébana posee cerca de 1600 especies vegetales, lo cual nos da una idea del tesoro biológico que poseemos. La primavera comenzaba a despertar en el bosque componiendo una sinfonía vegetal en el espacio prácticamente virgen por el que discurría nuestra ruta.




El bosque lame las laderas de los picos de Europa, la desnudez de los árboles nos permite ver las profundas canales que aun albergan las invernales nieves, en las fotos el inicio de la canal de Lechugales que asciende hasta la Morra de Lechugales.


Los pies se nos hunden en la alfombra de la hojarasca, solo nuestros pasos compiten con el sonido de los pájaros que aqui habitan, es época de nidos tranquilos,- abril hueveril , mayo pajarayo - Javi cerrando el grupo hecho un chaval.


Los musgos pintan el suelo del bosque, viejas rocas que hasta aqui rodaron en la noche de los tiempos son el espacio donde asentarse y crecer. El monte  se muestra virgen, son ya lejanos los días en que el hacha imponía su ritmo de pan nuestro de cada día.



Un alto en el camino para hacer unas fotos de recuerdo, subíamos contentos, el agua nos respetaba, la amenaza de lluvia estuvo presente durante la semana , pero llegado el momento ...sonrisas y manga corta. Nos sentíamos los enanitos del bosque ante un espacio tan privilegiado.

Descendiendo en el bosque de robles, una profunda bajada provocada por los arroyos que descienden desde el collado de Cámara, el camino se hace más ancho y deja ver las huellas de las viejas explotaciones madereras.



Atravesada la masa forestal y ya camino de Mogrovejo posamos con el fondo de los Picos , desde este punto pudimos ver Peñas Negras - la canal de Ontuje Tanarrio y la cumbre del pico del Prao la Llampa ( en el centro de la imagen) - previsto para el 18 de septiembre en en calendario del grupo.



Hacemos un alto en el camino para contemplar parte de nuestro recorrido y soñar y dibujar nuevos itinerarios. Paco nos retrató para el recuerdo con estas estupendas fotos. aqui entroncamos con los caminos que saliendo de Mogrovejo conducen a la Peña Oviedo.




Emboscados en un bosquete de robles encontramos el lugar y asiento idóneo para calmar nuestras papilas que ya estaban en desasosiego, un ratin de descanso y camaradería en la ruta, las viandas volaban y las fuerzas se restituían para el último tramo.


El fino olfato de Sonia detecta el queso "tres leches " de quesería Rio Deva y solicitaba una cata de tan soberbio manjar, cosa fina, que no sabemos si sería por la hora o por el sitio, pero según ella aqui todo sabe mejor. Yo le llamo  el queso golondrina...lo empiezas y vuela.



Desde el viejo Roble avistamos el collado  Ontuje de Tanarrio (1.666 metros ) y el pico del Prao la Llampa...nos esperan el 18 de septiempre. 1000 metros de desnivel desde Tanarrio.


En el fondo del valle y ligeramente iluminada vemos  la villa de Potes, nuestros pasos ya se encaminan hacia el bonito pueblo de Mogrovejo, , ya vamos cuesta abajo por buenos caminos y hermosas vistas. Quien sabe si los árabes usaron estas centenarias sendas en su huida de Covadonga.




Llegando al bonito y elegante pueblo de Mogrovejo cayeron cuatro gotas que no empañaron una bonita jornada  para este grupo de valientes, la ruta discurrió en buena parte por el territorio salvaje del  parque nacional, la ruta merece ser repetida en cualquiera de la cuatro estaciones pues tiene alicientes suficientes como para complacer a los mas exigentes.


Mogrovejo  ha unido en los últimos tiempos a su belleza natural un conjunto arquitectónico que merece ser conocido, buenas casas montañesas, torre medieval, museo de la escuela rural y una magnifica iglesia  hacen de este pueblo uno de los más bonitos de Cantabria.




En Mogrovejo pudimos tomar un refrigerio y concluir el día , nos alegramos mucho de habernos arriesgado a salir en un día en que los meteorólogos nos anunciaron lluvia , pero que pudimos disfrutar y que recordaremos largo tiempo.


Pilar y Javi celebraban en estas fechas sus respectivos cumpleaños, escucharon el cumpleaños feliz  cantado a grito pelao y nos invitaron unas rondas para celebrarlo. Desde esta crónica les deseamos lo mejor en el año que ahora comienzan.

                                                                Seguiremos explorando las muchas posibilidades que nos ofrece el parque Nacional, en tiempo de pandemia es una de nuestras grandes opciones .

                                                                                                               Salud y montañas bellas.

                                                                                                            Alfonso Martínez Toledano.

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